Durante un período de guerra civil entre las tribus de Israel, la tribu de Benjamín se encontró en una desesperada retirada. Al huir hacia el desierto, buscando refugio en la roca de Rimón, los israelitas los perseguían con determinación. Esta persecución resultó en la pérdida de cinco mil vidas benjamitas a lo largo de los caminos, y otros dos mil fueron abatidos mientras la persecución continuaba hacia Gidom. Este pasaje ilustra las severas consecuencias del conflicto interno y la trágica pérdida que puede ocurrir cuando se rompe la unidad.
La narrativa sirve como una advertencia sobre los peligros de la división y la necesidad de reconciliación. Nos recuerda que cuando las comunidades o grupos están divididos, la lucha resultante puede llevar a resultados devastadores. Esta historia nos anima a buscar resoluciones pacíficas y a trabajar hacia la comprensión y la armonía dentro de nuestras comunidades. Nos llama a reflexionar sobre la importancia de la unidad y el papel de la compasión y la sabiduría en la resolución de disputas, instándonos a aprender del pasado para construir un futuro más pacífico.