El versículo nos recuerda la promesa del regreso de Cristo, una esperanza central en la fe cristiana. Destaca la certeza de las promesas de Dios, enfatizando que, aunque el tiempo pueda parecer incierto para nosotros, Dios opera en un calendario divino. La frase "en un poquito" está destinada a alentar a los creyentes a permanecer pacientes y firmes en su fe, incluso cuando las circunstancias son desafiantes o la espera se siente prolongada. Esta certeza busca infundir esperanza y perseverancia, recordándonos que los planes de Dios siempre están a tiempo y que Él cumplirá Sus promesas sin demora.
El contexto de este versículo es crucial, ya que habla a una comunidad que enfrenta pruebas y tentaciones de abandonar su fe. Al afirmar que "el que ha de venir vendrá", el versículo asegura a los creyentes que su fe y paciencia serán recompensadas. Es un llamado a permanecer vigilantes y fieles, confiando en que el tiempo de Dios es perfecto y que Sus promesas son seguras. Este mensaje de esperanza y certeza está destinado a proporcionar consuelo y fortaleza, animando a los creyentes a aferrarse a su fe y continuar viviendo en anticipación del regreso de Cristo.