El versículo de Apocalipsis 22:20 es un poderoso recordatorio de la promesa del regreso de Jesucristo. Es una declaración del propio Jesús, afirmando que volverá pronto. Esta certeza es central en la creencia cristiana, enfatizando la esperanza y la anticipación de su segunda venida. La respuesta, "Amén; sí, ven, Señor Jesús", es una expresión de oración que refleja el anhelo y la disposición de los creyentes para su retorno. Este sentimiento refleja la expectativa y el deseo de los primeros cristianos por el cumplimiento del plan de Dios.
Este versículo anima a los creyentes a vivir con un sentido de urgencia y propósito, sabiendo que el regreso de Cristo es inminente. Llama a una vida de fidelidad y vigilancia, recordando a los cristianos que deben estar preparados para el día en que Jesús vuelva. La promesa de su regreso ofrece consuelo y esperanza, especialmente en tiempos de prueba e incertidumbre, asegurando a los creyentes que las promesas de Dios son verdaderas y se cumplirán. Esta anticipación del regreso de Cristo es una fuente de fortaleza y aliento, motivando a los cristianos a permanecer firmes en su fe y a continuar compartiendo el mensaje del Evangelio con los demás.